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- Registrado desde 20/10/2023
- Categoría Mujeres
- Ubicación Colombia
- Lenguajes hablados Italiano, english, español
- Canal Telegram t.me/sweetsocietyy
> ¿Te gustan las chicas que parecen dulces… pero te dejan sin aliento?
Soy Molly Sweet, tengo 18 añitos y una mente tan traviesa como mi sonrisa. Delgada, juguetona y con una colección de juguetes que no están aquí solo para decoración.
Me encanta explorar, provocar y, si me dejas, dominar. Aquí encontrarás lencería deliciosa, una mesita de sorpresas y juguetes que se mueven solos (sí, leíste bien).
Mis juguetes favoritos (y tus futuros pecados):
Mi caballito travieso – Un consolador realista de 30 cm que no es para cualquiera… solo lo uso cuando de verdad quiero sentirlo todo.
El vibrador automático – Tiene 9 pulgadas (unos 23 cm) y se mueve solo. ¡10 modos distintos para volverme loca mientras tú solo miras!
El Dios de los placeres – Un vibrador inteligente que controlo desde una app… o puedes controlar tú. ¿Te animas a manejar mi cuerpo a distancia?
Mi clásico de 21 cm – Largo, firme y listo para meterme en problemas. Cuando lo uso, no hay vuelta atrás.
Y claro… mucha lencería – De encaje, transparente, ajustada, atrevida. Me gusta jugar con estilos… y quitármelos despacio.
¿Qué puedo hacer contigo en privado?
Aquí mando yo… o te dejo pensar que lo haces tú. Me gusta complacer, pero también castigar. Estos son algunos de mis placeres favoritos:
Dominación suave o intensa – Si eres bueno, puedo ser dulce. Si no… mejor.
Control de pene (CEI, JOI) – Yo te digo cuándo, cómo y si puedes terminar.
Striptease lento y provocador – Desnudarme despacio, mientras te mueres por tocar.
Masturbación con los dedos – Mojadita, susurrando tu nombre.
Penetración con juguetes – Desde lo más suave hasta el caballo, si te atreves a verme.
Roleplay caliente – Alumnita rebelde, profesora pervertida, niñita malcriada… tú eliges.
Dirty talk y miradas que matan – A veces, lo que digo excita más que lo que muestro.
Si tienes fantasías… háblamelas al oído. Yo las convierto en realidad.
No prometo portarme bien. Prometo que te va a encantar.